Unidad para resistir
Los poderes económicos han decidido ir por todo, por los recursos, por la salud, por la educación, por la dignidad del pueblo argentino. Han decidido aumentar sus enormes ganancias de siempre en forma exponencial y los que sufrimos esa decisión somos casi la totalidad de la sociedad. Los trabajadores asalariados o no, los pequeños comerciantes o industriales, los viejos, los niños y sobre todos los desamparados de siempre. Hay que resistir, en la calle, en la fábrica, en la escuela, en la chacra, en los barrios, en las picadas, en el asfalto, en el barro. Pero solos, de a sectores aislados no se puede, de a uno vamos a ser derrotados como siempre. Es imprescindible la Unidad, es indispensable que cada reivindicación popular sea acompañado por el conjunto de la sociedad y no solamente como gesto solidario sino como barrera de autodefensa. De a uno nos barren, juntos, somos casi invencibles
Unidad para construir una esperanza
Resistir no es solo aguantar. Es pararse enfrente, es decidir en algún momento que luchar es mejor que resignarse, es entender que no hay espacio para la desidia o la desesperanza. Resistir ya es el comienzo de la esperanza. De un retorno a tiempos idos y mejores, de construcción de nuevos tiempos. Esperanza de que la pesadilla se termina pero que de nuestro lado hagamos el máximo esfuerzo para despertarnos y para despertar a todos. Esperanza como senda hacia la concreción y no como mera ilusión. Esperanza de que, siempre, entre todos o casi todos, podemos pensar un barrio, una colonia, un pueblo, una ciudad, una provincia, una patria, mucho mejor.
Unidad para tener futuro
La resistencia, la esperanza no deben ser un fin en sí mismas, sino que deben constituirse en las bases en la reconstrucción o la construcción de algo nuevo o mejor. De un futuro, no lejano, donde estemos incluidos todos, donde rescatemos enseguida a los desposeídos de hoy, los jubilados, los niños con padres sin trabajo, los enfermos sin cobertura y al mismo tiempo se asienten rápidamente los cimientos para la recuperación del salario de los trabajadores, para que no se vayan los científicos e incluso seguir repatriándolos, para construir más escuelas, hospitales, universidades, para que la pequeña y mediana industria vuelva a ser el motor económico histórico que nunca debió dejar de ser, para desarrollar industrias. Para pensar un futuro desde el sujeto colectivo y no desde la individualidad. Para de una vez por todas, ser una Patria.
About The Author
